Imaginemos por un momento que para fritar un huevo tuviéramos que inventar, desde cero, una sartén y una estufa. Sería necesario crear la resistencia, lograr transmitir energía para calentarla y luego tomar un pedazo de metal para forjar, a punta de martillo, la sartén. Si nos antojáramos de huevo todos los días, esta sería la tediosa tarea cotidiana para prepararlo. Complicado ¿no?
Ahora imaginemos que esta sartén y esta estufa solo sirven para fritar huevos … Por algo parecido tienen que pasar los neurocientíficos para realizar sus estudios: deben ser ingenieros de hardware para crear, ellos mismos, los dispositivos y aparatos que les servirán para estudiar el cerebro de acuerdo a lo que necesiten descubrir.
Y lo peor es que la vida útil de estos equipos termina cuando se haya alcanzado el objetivo del estudio. Es decir, gastan mucho tiempo desarrollando dispositivos que usarán una sola vez. Partiendo de este problema nace Open Ephys, un sitio web para compartir diseños y especificaciones de hardware de código abierto para investigaciones neurocientíficas.
En este sitio los neurocientíficos pueden encontrar y aportar instrucciones y diagramas para construir hardware de código abierto que ha sido utilizado en otras investigaciones. De esta forma se comparten soluciones que ahorrarán tiempo valioso, que anteriormente se utilizaba en el desarrollo de equipos muy específicos. Ahora, por tener acceso a varios dispositivos de código abierto, los científicos pueden encontrar un equipo que sirva para sus investigaciones, o modificar alguno para que se acomode a sus objetivos.
Sus creadores, Joshua Siegle y Jakob Voigts, dos investigadores del laboratorio Moore de la universidad de Brown, buscan con este sitio generar conciencia sobre cómo el código abierto elimina la redundancia, reduce costos y aumenta la productividad en las investigaciones. La idea surgió hace tres años, cuando los dos científicos estaban investigando la actividad en el hipocampo y la corteza cerebral de ratones y gastaron casi medio año buscando las herramientas que les permitieran registrar las señales eléctricas que venían del cerebro, pero ninguna era lo suficientemente adecuada. Entonces, en vez de crear una nueva herramienta que fuera tan específica que solo sirviera para su estudio, decidieron iniciar un proceso de creación en línea, recogiendo retroalimentación de una comunidad de neurocientíficos mucho más amplia. De esta forma, su nuevo dispositivo podría responder a diferentes necesidades investigativas.
Cada uno de los proyectos publicados cuenta con una descripción, imágenes y links para descargar los diagramas. También tiene dos datos que me parecieron muy importantes: el tiempo de construcción y el costo de los materiales.
Además han creado una wiki muy completa para manejar toda la documentación, información e instrucciones de sus dispositivos. Todos los neurocientíficos que deseen colaborar a que esta wiki crezca con sus desarrollos pueden suscribirse en este link ya que, como dicen ellos, las soluciones y los problemas que se presentan en cada laboratorio son un poco diferentes.
Aunque podemos ver este proyecto como algo que ayuda en la productividad y el ahorro de tiempo en los procesos investigativos, yo prefiero pensar que es una muestra de lo más lindo que tiene Internet, y es que nos une, nos conecta para compartir información útil que hace nuestras vidas más sencillas. Es gracias a este tipo de iniciativas que podemos conocer mucho más acerca del mundo en el que vivimos.