El estudio de arquitectura de Zaha Hadid se encargó de edificar el Heydar Aliyev Centre, un espacio dedicado a los programas culturales de Bakú, la capital de Azerbaiyán. La fluidez en la silueta de la obra de Hadid manifiesta los deseos de la nación por modernizarse y crecer culturalmente a través se sus atributos arquitectónicos. El edificio se distingue de entré los demás por su dinamismo, resultado del uso de ondulaciones y pliegues en su estructura; estos elementos hacen de los límites entre contorno y espacio, interior y exterior, algo inexistente.